Me he puesto a escuchar la canción que publiqué en mi última entrada (Con las ganas, Zahara) y ha entrado en mí ese punto nostálgico al que todos solemos llegar en un momento dado. Así que aquí estoy, escuchando una de las canciones más tristes que jamás he conocido e intentando hablar sobre sentimientos, los que al parecer yo no poseo. ¿Acaso soy de piedra? No lo creo pero a veces me gustaría pensar que simplemente sí. "Te quiero o no te quiero. Pero no me digas las dos cosas porque así no podemos estar". Es duro pensar que para otros es fácil lo que para ti resulta imposible, ¿cómo se supone que debo de sentirme ahora que he perdido aquello que muchos luchan por mantener, otros por venderlo, otros por perderlo antes que el de al lado... ¿cómo se supone que debo sentirme cuando no siento nada al perderlo? ¿o al mantenerlo? ¿sería diferente? sé que tengo mis dudas, todavía las tengo pero debo de mantenerme fuerte como estos últimos días atrás porque es lo que hace que no termine por hundirme. Ojalá pueda ser positiva mucho más tiempo y esta pequeña nostalgia que se instaló en mí hace mucho tiempo se acostumbre a tener algo positivo cerca, porque quizá así podremos hacer de la nostalgia algo con sustancia, algo provechoso, algo triste pero a la misma vez bonito.
Best Wishes.
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